Cerca de 200.000 habitantes de la localidad 19 de Ciudad Bolívar fueron sorprendidos en la madrugada del miércoles 11 de octubre de 2017, al no encontrar transporte para ir a sus trabajos o estudios; esto a causa de la suspensión de 25 rutas azules y 12 alimentadores tras la medida tomada improvisadamente por la empresa Transmilenio S.A., ente gestor del Sistema Integrado da Transporte Público de Bogotá, en contra del concesionario Suma S.A.S., responsable de la presentación del servicio en esa zona de la Capital de la República.

El Concejal del Polo Democrático Alternativo, Celio Nieves Herrera, advirtió que desde el año 2015, en diversos debates sobre la operación del SITP – Zonal (Buses Azules) se pusieron en evidencia las dificultades en el Sistema. La empresa Transmilenio, ente gestor del SITP en el Distrito Capital, quien tiene la responsabilidad de garantizar el transporte a los bogotanos, ante semejante crisis en el transporte y la movilidad de centenares de miles de habitantes de la localidad de Ciudad Bolívar,  sencillamente, usando el pretexto de la falta de pólizas para amparar un eventual incumplimiento del contrato y contra accidentes graves, se excusa manifestando que “Todas y cada una de las decisiones que se han tomado, desde enero de 2016 hasta la fecha, han sido responsables, considerando aspectos técnicos, estructurales, financieros y jurídicos, siempre respetando los deberes derivados de un Estado de Derecho y cuidando los recursos públicos” lo cual es una desfachatez y una completa irresponsabilidad para con los usuarios al no prever la parálisis del transporte. Según comunicado del Operador Suma, Transmilenio los notificó de la decisión a las 6:00 p.m. del martes anterior, lo cual llevó a generar traumatismos en la movilidad de los ciudadanos.

Nieves Herrera señaló que la medida tomada por la administración distrital en contra del operador del SITP Zonal en Ciudad Bolívar y que afecta a la ciudadanía es un acto de negligencia frente a las dificultades advertidas y enfatizó en que de no tomarse medidas urgentes ante esta situación, la administración Peñalosa llevaría a la ciudad a un caos en el transporte en los próximos días o meses, por mayor suspensión en el servicio, por cuenta de Transmilenio, por la protesta o el retiro masivo de los operadores.